NUNCA ES TARDE…
PARA ENCONTRAR LA FELICIDAD

Si hacemos caso a los investigadores de Harvard, lo único que necesitamos para ser felices es tener unas relaciones positivas. Con relaciones nos referimos a relaciones interpersonales de cualquier tipo.

Para llegar a esa conclusión han necesitado de un estudio de casi 75 años preguntando a la gente qué le hace feliz. Al final se ha demostrado que no es ni el dinero, ni los viajes, ni un coche nuevo, ni…, ya que todo eso puede hacerte feliz pero no es algo duradero.

El motivo es que las relaciones tienen una gran influencia en nuestra salud. El director del estudio, un psiquiatra y profesor de psiquiatría en la “Harvard Medical School” dice que “cuidar del cuerpo es importante, pero atender nuestras relaciones es también una forma de cuidado personal”.

Las relaciones positivas si, a la vez son saludables y cercanas, ayudan a las personas a mantenerse felices a lo largo de sus vidas, ya que esas relaciones nos protegen de los malos momentos y, de acuerdo con la ciencia, también se ha demostrado que pueden ayudan a reducir el deterioro cognitivo y físico.

Y hay tres factores clave en todo esto: el primero es que la soledad afecta a las personas de muchas formas, reduce su nivel de felicidad e incluso lleva a que las funciones del cerebro se deterioren de forma más rápida.

El segundo factor es la calidad de las relaciones. Es mejor tener pocos amigos, pero buenos, que muchos y poco cercanos. Hay que evitar los conflictos que aumentan el estrés y afectan a la salud física, por lo que impide la felicidad.

El tercer factor es la protección del cerebro. Esto es algo que las relaciones positivas permiten ya que se encontró que cuando se tienen relaciones con personas en las que se puede confiar, este hecho ayuda a mantener la memoria en buenas condiciones y por más tiempo.